¿Hasta dónde son ciertos los beneficios del DHA?

El ácido docosahexaenoico o DHA es un ácido graso recomendado durante la gestación, debido a que se le atribuyen numerosos beneficios tanto para el feto como para la madre, pero existe cierta incertidumbre sobre la veracidad de estos. Encontramos multitud de artículos respecto al tema pero no una única corriente, ya que es un tema que invita a  ser investigado por la variedad de vertientes que se pueden abrir y la disparidad de resultados en los estudios ya realizados. En cualquier caso, y centrándonos en los beneficios que se le atribuyen en relación al embarazo y al desarrollo neurológico del neonato, podemos dividir los diferentes enunciados en dos bloques, gestación y parto, y desarrollo del niño.

Durante la gestación se ha mostrado que su ingesta disminuye la incidencia de partos prematuros (1,09% vs 2,25%; RR ajustado, 0,49; IC 95%: 0,25-0,94; P = 0,03), además de que los recién nacidos muestran mayor peso (IC 95%: 23 a 114 g; p = 0,003), por lo que nos encontramos con menor cantidad de nacidos de bajo peso y talla (3,41% vs 5,27%; RR ajustado, 0,65; IC 95%: 0,44 a 0,96; p = 0,03), esto podría deberse a la baja incidencia de partos prematuros y con ello a la mayor estadía del bebé dentro del útero. En la misma línea, de forma significativa, los bebés nacidos de madres que toman suplementos de DHA, en el momento del parto ingresan menos en cuidados intensivos (1,75% vs 3,08%; RR, 0,57; IC 95%: 0,34 a 0,97; P=0,04), respecto a los nacidos de madres que no los toman³.

 Pero no todo es bueno, ya que se ha observado que las niñas nacidas de madres que toman suplementación de DHA durante la gestación obtuvieron una puntuación más baja en lenguaje en las escalas de Bayley, por lo que tienen riesgo de un subdesarrollo del mismo, lo cual puede deberse al azar o bien estar mostrando cierta sensibilidad al DHA por parte de las niñas.³  Además a largo plazo, en niños de 5 años se ha mostrado que los que estuvieron expuestos a suplementos de DHA en el útero, tuvieron menos calidad de estímulos en el hogar durante su infancia (b=1.71;95%CI:1.09 ,2.33) frente aquellos no expuestos (b = 0.71; 95% CI: 0.13, 1.29)¹.

En relación a las patologías que pueden presentar los bebés en sus primeros días de vida, la hemorragia intraventricular del recién nacido (más común en prematuros), es una de las más peligrosas. Respecto a esta se observa una asociación entre los altos niveles de DHA durante sus primeras semanas de vida y  la disminución de la actividad intraventricular hemorrágica. Por lo que un aumento del 1% de DHA hace que se disminuyan 4.3 veces las probabilidades de hemorragia intraventricular y que si está existe se disminuyan 3.9 veces las probabilidades de que aumente su gravedad (IC 95%: 1,22 a 12,28; P = 0.022), lo que conllevaría consigo una mejoría de la calidad de vida del bebé e incluso la disminución o anulación de la aparición de posibles secuelas².

Tras el parto, las premisas que se muestran son dispares ya que no hay un acuerdo sobre los beneficios concretos que produce el DHA en el desarrollo de los niños, por lo que los enunciados que se observan dan lugar a confusión. A pesar de ello diversos estudios muestran que la suplementación durante el embarazo junto a niveles elevados de DHA en el recién nacido podrían mejorar el desarrollo microestructural del cerebro y de forma significativa su desarrollo cognitivo en la etapa preescolar, además de la atención y  la función ejecutiva.

También se ha intentado asociar con la mejora en la depresión materna, pero los resultados no son concluyentes ni significativos para poder afirmar esto de forma contundente (9.67% vs 11.19%; RR ajustado 0.85; IC 95% 0.70-1.02; P=.09)³.

En este punto, podemos observar que se asocian tanto perjuicios como diversos beneficios a la suplementación de DHA y al aumento de su consumo en alimentos durante la gestación, pero aún queda mucho por  avanzar, ya que por el momento no se  conoce la cantidad idónea que se debe consumir en el caso de que todos los beneficios sean reales y aceptados, tampoco se sabe si esta podría consumirse a través de la alimentación, ni la certeza de las premisas que se le otorgan en el desarrollo neurológico de los niños.

Autor: Martínez Moreno, Celia María

Referencias:

1.           Ramakrishnan U, Gonzalez-Casanova I, Schnaas L, DiGirolamo A, Quezada AD, Pallo BC, et al. Prenatal supplementation with DHA improves attention at 5 y of age: A randomized controlled trial. Am J Clin Nutr. 2016 Oct 1;104(4):1075–82.

2.           Tam EWY, Chau V, Barkovich AJ, Ferriero DM, Miller SP, Rogers EE, et al. Early postnatal docosahexaenoic acid levels and improved preterm brain development. Pediatr Res. 2016 May 1;79(5):723–30.

3.           Makrides M, Gibson RA, McPhee AJ, Yelland L, Quinlivan J, Ryan P, et al. Effect of DHA supplementation during pregnancy on maternal depression and neurodevelopment of young children: A randomized controlled trial. JAMA - J Am Med Assoc. 2010 Oct 20;304(15):1675–83.